DESPUÉS DE DOS AÑOS..
Hola de nuevo por aquí.
Increíble, dos años que no vengo al Blog. Cómo pasa la vida. Y cuántos cambios!! Cuantas cosas que van y vienen. El 2018 fue año silencioso, en pausa. Me operé de un By pass Gástrico con el que reduje mi peso de 99 kilos a 46; decisión tomada para mejorar mi calidad de vida y evitar futuras complicaciones de salud. Tenía diabetes, presión arterial alta y mis riñones empezaban a sufrir quebrantos. Hoy año y medio después no tengo diabetes, no tomo pastillas para la presión y mi riñón como de quince. Gracias a la vida y a mi hija que me motivó a tomar esta decisión. Por ella y por satisfacer un deseo que ella tenia , de pasar más años conmigo y a su lado, tomé la decisión. Y claro por mi, por mejorar mi calidad de vida, pues mi sobrepeso ya me impedía caminar más de media cuadra sin que se me durmieran las piernas. Hoy camino cuadras enteras a paso rápido, atrás quedaron los dolores de las piernas, la fatiga, las caídas de bruces por perder el equilibrio, los ronquidos, ahogos y apneas nocturnas. Recuperé el aliento, la vida , la energía.
En el 2018 no hice más que adaptarme a esta nueva vida. Un proceso dificil y complicado. Reaprender a comer en pequeñas cantidades, despacio y muy masticado, para no atorarme y vomitar. Disciplina para tomar complementos alimenticios para aumentar la ingesta de proteínas y vitaminas; controlar la ansiedad de comer todo lo que ahora no debo, días de depresión y llanto, de vómitos después de cada comida, de baja energía , sin querer salir de casa, de desmayos en la calle y manejando, en fin de volver a empezar, de desaprender y de adquirir nuevos hábitos. Y ahí voy. Cada día mejor, más adaptada, pasando altibajos, unos días buenos otros malos. Pero cada vez mas buenos que malos. Pero eso sí, sin dejar de trabajar un minuto. A los pocos días de mi operación ya tenia un contrato para elaborar pruebas de selección de personal para concursos de empleos de carrera administrativa pública. Y no he parado. Y después de 10 meses empezó mi recuperación. Llegó diciembre y me fui de vacaciones con mi familia a Medellin a pasar los días de fin de año, invitados por mi hermano. Y de regreso, un nuevo año, energías renovadas y retomando mi vida.
En el próximo blog les hablaré de lo que ha sido el 2019. El año de volver a empezar
Increíble, dos años que no vengo al Blog. Cómo pasa la vida. Y cuántos cambios!! Cuantas cosas que van y vienen. El 2018 fue año silencioso, en pausa. Me operé de un By pass Gástrico con el que reduje mi peso de 99 kilos a 46; decisión tomada para mejorar mi calidad de vida y evitar futuras complicaciones de salud. Tenía diabetes, presión arterial alta y mis riñones empezaban a sufrir quebrantos. Hoy año y medio después no tengo diabetes, no tomo pastillas para la presión y mi riñón como de quince. Gracias a la vida y a mi hija que me motivó a tomar esta decisión. Por ella y por satisfacer un deseo que ella tenia , de pasar más años conmigo y a su lado, tomé la decisión. Y claro por mi, por mejorar mi calidad de vida, pues mi sobrepeso ya me impedía caminar más de media cuadra sin que se me durmieran las piernas. Hoy camino cuadras enteras a paso rápido, atrás quedaron los dolores de las piernas, la fatiga, las caídas de bruces por perder el equilibrio, los ronquidos, ahogos y apneas nocturnas. Recuperé el aliento, la vida , la energía.
En el 2018 no hice más que adaptarme a esta nueva vida. Un proceso dificil y complicado. Reaprender a comer en pequeñas cantidades, despacio y muy masticado, para no atorarme y vomitar. Disciplina para tomar complementos alimenticios para aumentar la ingesta de proteínas y vitaminas; controlar la ansiedad de comer todo lo que ahora no debo, días de depresión y llanto, de vómitos después de cada comida, de baja energía , sin querer salir de casa, de desmayos en la calle y manejando, en fin de volver a empezar, de desaprender y de adquirir nuevos hábitos. Y ahí voy. Cada día mejor, más adaptada, pasando altibajos, unos días buenos otros malos. Pero cada vez mas buenos que malos. Pero eso sí, sin dejar de trabajar un minuto. A los pocos días de mi operación ya tenia un contrato para elaborar pruebas de selección de personal para concursos de empleos de carrera administrativa pública. Y no he parado. Y después de 10 meses empezó mi recuperación. Llegó diciembre y me fui de vacaciones con mi familia a Medellin a pasar los días de fin de año, invitados por mi hermano. Y de regreso, un nuevo año, energías renovadas y retomando mi vida.
En el próximo blog les hablaré de lo que ha sido el 2019. El año de volver a empezar
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